Autodestructores
Hace unas semanas, un gran amigo mío escribió un post sobre lo que él bautizó como las Maridramas. Estos personajes se caracterizan por el juguete preferido de los guionistas, así “Lo mismo viajan a la Luna que se sacan una carrera sin ni siquiera ir a clase que descubren hermanos perdidos o les crece un brazo tras haber sido abducidos por alienígenas… en apenas un año”. Mi hermano ponía como ejemplos a Kelly Taylor en “Sensación de vivir”, Abby Lockhart en “Urgencias” y Desmond en “Perdidos”.
Hoy me gustaría hablaros de unos personajes que son primos hermanos de las Maridramas: los Autodestructores. Lo que les diferencia de las Maridramas es que ellos no se hacen, si no que nacen. Me explico, mientras que a las Maridramas las voluntades de los guionistas hacen que les pasen las mil y una aventuras dadaístas, los autodestructores son desgraciados innatos que todo lo que tocan convierten en caca. Y claro, con lo desgraciados que son, tú les coges cariño pero, ojo peligro, no son ningunos santos mártires, pues acostumbran a ser unos locos cabrones con tendencias alcohólicas y arrabaleras.
Los autodestructores te hacen sufrir mucho pues, con sus desastrosas aptitudes sociales, lo mínimo que les puede pasar es que les partan la cara. Mis autodestructores favoritos son una chica y un chico que me hacen sufrir a partes iguales. Una está en el espacio y el otro en Texas, pero siendo este el estado de Bush, a efectos prácticos es lo mismo.
El habitante más famoso de Battlestar Galactica es Kara Thrace. Starbuck es una borracha, jugadora, fumadora de purazos y guarreras, en general. A Kara le ha pasado de todo: malos tratos, muertes, cylons, hijas falsas y Lee Adama. Y es que Starbuck es lo peor, pero no puedes dejar de quererla y sentir que ella es el alma de Galactica.
Tim Riggins es el más borracho de los Panthers de Dillon y eso con sólo 17 años. Dijésemos que Tim es el típico tío tocho que habita los institutos del mundo, un gigantesco patán que apenas sabe leer, que vive con su hermano tras ser abandonados por sus padres y que siendo el fullback del equipo, recibe todas las ostias. Eso tiene que dejarte pajarito por narices.
Son almas solitarias e incomprendidas que, a su vez, son insondables y no dejan que nadie se les acerque. Y, de hecho, a veces es mejor no acercarse, pues es tal rabia la que llevan dentro, que son personajes altamente violentos. Los autodestructores no saben amar ni ser amados, al menos, nunca lo hacen al tiempo que deben. Sé que estoy sonando como una pitonisa televisiva trasnochada, pero si no me creéis, pensad en la tormentosa relación de Starbuck y Apollo o la no menos dolorosa relación entre Tim y Lyla Garrity o Tim y Tyra.
Ai, lo que me hacen de sufrir estos dos. Quizá no son mis personajes favoritos de todos los tiempos, pues nada tienen que ver Starbuck con Lorelai o Tim con Chandler, pero sí que quizá serían los primeros a los que me llevaría a casa para pegarles un par de castañas y luego darles un abrazo y decirles que todo irá bien y que no van a sufrir más. Dadle a los vídeos de Starbuck y Tim Riggins para ver compendios de sufrimiento inaudito. Por supuesto, si no estáis al día de sus disfuncionales vidas, estos videos contienen cantidades ingentes de spoilers.