Malo maloso de la casa de los malos

Coincidiremos todos en que Ben Linus (Michael Emerson) es uno de los malos más chungos de la televisión que nos ha tocado vivir. El tío miente más que habla, es cruel, frío, manipula hasta a las piedras, se carga a cualquier hijo de vecino que le lleve la contraria y oye, también hace sus pinitos en el campo de la tortura. Miradle bien, el pobre tiene una pinta de perturbado insomne capaz de provocar alteraciones en la Fuerza. Ya sé que medio mundo se imagina a Voldemort como Ralph Fiennes y el otro medio como Celia Hodes, pero yo me lo imagino como Ben Linus.

Michael Emerson es uno de los nominados a mejor actor secundario (drama) en la próxima edición de los Emmy. Apesten o no, Michael es la apuesta de ByTheWay.tv para ganar el premio, que esperemos que a Michael no le parezca tan horroroso como a nosotras, porque sería el segundo que se llevase a casa. En 2001 Emerson ganó el Emmy a la mejor interpretación de actor invitado por los 6 capítulos de The Practice en los que apareció interpretando a, cómo no, un asesino en serie que se dedica a manipular y acosar a la pobre Lindsay (Kelli Williams), a quien también podríamos bautizar como una maridrama de los juzgados, ya que a la pobre parecen perseguirla todos los asesinos en serie de Boston.

El caso es que a Michael va a resultarle difícil alejarse de esa estela de maldad de deja a su paso, en parte por su aspecto, y en parte por la trayectoria que lleva el hombre, que en 2002 apareció en The X-Files (Sunshine days) interpretando a un psico-tarado retraído que utilizaba sus poderes para recrear a la familia Brady. El problema era que si alguien entraba y no le caía bien a Marcia, acababa peor que un pasajero de cola.

Por si no fuera poco, Emerson también se dejó caer por Law and Order: Criminal Intent (Phantom). Adivinad de qué hacía… venga va… es fácil… vaaaale, el tío era asesino de niños. Si es que se me hace difícil ver a este hombre en papeles luminosos, poco turbios o ligeramente jocosos, todo lo contrario de lo que seguramente hizo en Saw, que no la he visto y seguramente no la veré, que luego me da miedo mirar debajo de la cama.

Seguro que si miramos detenidamente su filmografía, encontraremos más de un papel que no incluya ser una escoria humana, como, sin ir más lejos, el que es su último proyecto, la comedia Ready? OK!, que tendría guasa que hasta en una comedia el hombre fuera la reencarnación de belcebú. Sin embargo, va a ser tan difícil imaginarle con alitas y aureola como es ver a Sarah Michelle Gellar y no plantarle una estaca en la mano. Pero oye, Michael, que no te importe, los malos siempre han sido, de lejos, mucho más interesantes.