¡Viva mi ego! – Primera Parte

Milo

¡Viva mi ego! Subsegmento: Se te va la olla.

Pues eso es lo que les está pasando a Milo Ventimiglia. Es lo que tiene pasar de ser el novio de una estrella a creerte que eres la polla en vinagreta. Vale que «Heroes» ha sido uno de los hits de la temporada y vale que Peter Petrelli es uno de los protagonistas con más poderes. De aquí a creerte que estás por encima del bien y el mal, y que la serie no sería nada sin ti o bien es que se te ha ido la pinza o te has esnifado hasta los pasos de zebra.

El tema es que el pequeño Milo, a quien contrataron en «Rocky Balboa» por tener la misma boca que Stallone, ha concedido una entrevista al Los Angeles Times para hablar de su gran sentido de la moda. Porque está claro que no va a hablar de sus grandes dotes actorales. Para muestra la escena final contra Sylar donde actuaba peor que Dani «Corso» Martín y Zachary Quinto se lo comía para merendar. A lo que iba. A parte de contarnos los trajes que tiene y lo bien que combina sus corbatas, al menda no se le ocurre nada más que soltar esta frase (la traduzco tal cual porque no tiene desperdicio):

«Como Peter Petrelli, tomé dos concienzudas decisones. Una fue subirme el cuello en el noveno episodio justo antes de salvar a la cheerleader. La segunda fue en la season finale cuando me quité la chaqueta para… patear al chico malo».

No sé chico, estoy segura que tomar tamañas decisiones debió ser de lo más duro que has tenido que pasar en la vida. Eso, y el día que tuviste que decidirte entre huevos fritos o hervidos.

Por si no os habíais percatado, en estas imágenes el pequeño Milo encarna al alter ego del superhéroe y, aunque lo del monopatín se me escapa, la última perla que ha soltado esta mente preclara ha sido afirmar que el complemento fetiche para adornar su look es un boli. Ya sea un Bic o un Montblanc [sic]. Porque, como todo el mundo sabe, el Don Simón sabe igual que el Faustino I.

Imagen: PITNB