Apocalipsis total

Que la ciencia ficción refleja mejor que muchos otros géneros las filias y fobias de la sociedad que la imagina y bla bla bla, eso ya lo sabemos. Así es como después de la Segunda Guerra Mundial los tiros iban hacia la destrucción total, el apocalipsis, el desastre nuclear y similares. Lo del fin del mundo siempre nos ha atraído, esto es así, aunque a medida que la historia se adentraba en los sesenta iban apareciendo mensajes de paz y exploradores estelares y naves que iban a lugares donde ningún hombre había ido antes. Que sí, que live long and prosper.

Ha nevado mucho desde entonces y quizás ha vuelto a despertar en nosotros el miedo nuclear, que se ha sumado al miedo epidemiológico, a la certeza de estar destrozando el planeta y a la idea, creo yo, de que comenzar de nuevo es una clara posibilidad. El cine ya hace algunos años que va por ahí, desde Armaggedon a 2012 pasando por Deep Impact, El día de mañana o La guerra de los mundos, todas una buena excusa para tirar de efectos especiales y frases a lo “larguémonos de aquí”.

En la tele últimamente estamos que nos salimos con apocalipsis y cosas. Este verano tenemos Falling Skies, con el mundo intentando recuperarse de un ataque alienígena a lo bestia (que supongo que es lo que hubiera hecho Anna de V si hubiera durado algo más), y en otoño llegará Terra Nova, donde haremos de la tierra futura un lugar tan inhabitable que tendremos que viajar al pasado.

En otoño también volverá The walking dead y su apocalipsis zombie, aunque para apocalipsis zombie casi que prefiero la de Berto, la verdad. Y qué narices, no me olvido de El barco, que siendo cutrilla como es, ha inundado la tierra y abierto la posibilidad de que Mario Casas sea el nuevo Adán. Bien por él.

Un recuerdo para las deaparecidas Outcasts, con su repoblación extrplanetaria y Survivors, con sus virus y sus cosas. Más alejadas en el tiempo, la mítica Jericho, con desastre nuclear y cacahuetes, y la gran, gran, gran Battlestar Galactica, que lo tiene todo: macro ataque (en plena época post 9/11), guerra, supervivencia, búsqueda, convivencia, repoblación, etc.

Acabo mi apocalipsis personal con las incursiones esporádicas en acontecimientos catastróficos más o menos bestias de series como Supernatural, Heroes, Buffy, Smallville, Dollhouse, Doctor Who, Alias o incluso Fringe. Y las que me habré dejado, porque no sé si incluir en el grupo series como Firefly, con la Tierra arrasada hace tiempo y esas cosas. Sea como sea, por si el mundo se acaba pronto, a leerse todosThe Hunger Games, la historia post-apocalíptica definitiva (o la que más engancha, por lo menos).

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