La tele que nos viene

El título engaña porque no, no voy a hacer un repaso de lo que está por venir, fruto de upfronts y anunciaciones varias (mayo siempre será mayo, es lo que tiene). Me voy a limitar a los tres que están sonando más estos días.

La temporada que estamos cerrando ha sido un total y verdadero strike-truño, no nos olvidemos de eso, por mucho que lo último de Galactica, Lost, o algunos Sandcastles in de sand estén ejerciendo cierto efecto sedante desmemoriador. Y claro, pasa lo que pasa, nos anuncian carne fresca y entramos en barrena.

Pero es que yo, desde los tiempos del 1,2,3, tengo instalado en mi fuero interno ese puntito de sufridora compulsiva que, voy a decirlo, hace que me dé algo de miedito eso que todos aplaudimos como lo último de JOSS (Whedon, se entiende): Dollhouse (con dollverse incluido, wtf), que no está prevista para otoño (oooooh) sino como replacement de midseason.

Como parece que Nathan Fillion se está manteniendo alejado del proyecto, no tendremos que sufrir por el trinomio fatal Fox + Minear + Fillion, pero algo en el trailer me chirría, a parte de Eliza Dushku. No me acaba de convencer el argumento a lo “Desafío total” y todo en general se me antoja algo chusco, pero JOSS es JOSS, así que lo que toca es un voto de confianza.

Luego está lo último de nuestro siempre querido, adorado e idolatrado Jey Jey. El hombre viene ahora con Fringe, que viene a recopilar lo mejor del friquismo televisivo más básico: Expediente X + Perdidos. Supongo que los chicos de Fox ya están preparando como locos las experiencias web paralelas a lo 360º, que es lo propio en los tiempos que corren.

A priori las sensaciones son buenas, a pesar de Joshua Jackson, así que ahora JJ solo tiene que hacer lo que todos esperamos de él: un piloto con el que casi toque la mano de los dioses televisivos y luego ya improvisaremos, ¿no?

90210

La última gran baza novedosa de la futura temporada, y esperanza blanca de la CW, es la nueva versión de Sensación de vivir. Gracias a dios que con este tipo de productos no les da por reimaginar, porque lo que queremos es lo que ofrecen: básicamente lo mismo de antes, pero con más lujo, más carne, más bottox (para eso tenemos a Lori Loughlin) y menos remilgos, por no decir ninguno, para entregar la flor, que con Brenda ya tuvimos suficiente. Y si además vuelven viejos conocidos como Rob Estes y Jennie Garth, ver 90210 con buenos ojos es una cuestión de principios. Os dejo con el flamante y recién publicado trailer. La verdad es que volver a oír la musiquilla es casi casi como estos días escuchar de nuevo las primeras notas de Indiana Jones: gallina de piel.