Autor: Montsinya

Sarah Jessica Friker

¡Cómo mola el photoshop! He aquí Sarah Jessica Parker. Mona, ¿verdad? Os puede parecer que sí o os podéis poner en plan Maxim. No voy a discutir por eso. Es más, me trae sin cuidado. Y es que, amiguetes, nos guste o no, esta chica se ha convertido en algo así como un icono de estilo, moda y bla bla bla. Nótese el “se ha convertido”, y no me refiero a que Sarah acabase la serie con mucho más glamour que con el que la empezó, que al final hasta sale mona, oye. No. Me refiero a que hay una

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En ocasiones confundo caras

Irene aún se debe estar riendo de una (otra) de mis famosas confusiones fisonómicas. Afrontémoslo, me llamo Montse y confundo caras. Vale, es grave, lo sé, pero es que la gente se parece, se parece demasiado, y luego voy yo y me hago la picha un lío. Ahí van algunos ejemplos de algunas de mis confusiones fisonómicas históricas: El primero no tiene perdón de los dioses, lo reconozco. Jerry O’Connell – Jason Bateman   Con las siguientes me acojo a que los rasgos marcados me confunden (como a Dinio la noche, está claro) Melina Kanakaredes – Lisa Edelstein   Y

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La insoportable inmortalidad del pez

Recapitulemos. The West Wing. Primera Temporada. Alguien cuenta a Danny Concannon, que quiere ligarse a C.J., que a la buena de Claudia Jean le gustan los peces. El pobre no pilla que se trata de galletitas saladas y, en vez de montarle un pica-pica, va y le regala una pecera White House Style con, y ahí comienza el asunto, un pez naranja dentro. Encantador, ¿no? ¡PUES NO! Veamos, todos hemos tenidos pececillos de colores. ¿Cuánto duran? 1 mes, 2 meses, a lo sumo 3 si realmente te tomas en serio que estos bichos tienen necesidades básicas como, digamos, comer o

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Superbowleando

La Super Bowl es la final de la liga nacional de fútbol americano (NFL). En términos de popularidad, relevancia y expectación, viene a ser como un partido de los Panthers de Dillon multiplicado por cien mil millones. Si añadimos actuaciones de mega estrellas antes del partido y durante el descanso, con algún que otro pezón suelto de vez en cuando, tenemos el mayor espectáculo televisivo de los estados juntitos. El tinglado en su conjunto es, tradicionalmente, el evento con más audiencia del año y, en consecuencia, con la publicidad más cara carísima. Desde hace años, y con el precedente del

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El viaje hacia Ítaca

Pues si hay que hablar de Lost, se habla, ¡qué coño! Si ahora voy y me suelto con lo de Lost pasará a la historia como fenómeno socio-televisivo, seguramente comenzaréis a abuchearme. Lo entiendo, de verdad, yo también me odio cuando me pongo tele-profunda, pero es que me llena de orgullo y emoción vivir el fenómeno Lost en primera persona (Lospíritu, me gusta llamarle). Bueno, digamos que más bien en segunda persona, ya que en primera persona supondría estar en la isla con Jack, dios de las antorchas y señor de los cocoteros. Por suerte o por desgracia (aún no

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Gossip Girl: deliciously decadent

Una acepción fantástica del inglés decadent es, literalmente “que provoca una satisfacción desenfrenada”. Hasta ahora, siempre había relacionado la palabra decadent con los pasteles de queso con nata y crema de fresas, pero los chicos de Gossip Girl me están haciendo cambiar de perspectiva. No es que la serie me provoque una satisfacción desenfrenada, ese privilegio se lo reservo a unos pocos elegidos, pero es innegable que nuestros teens favoritos y sus encantadores padres viven en un mundillo deliciously decadent, y no me refiero al fashion-loft de los Humphrey, que por mono que sea y cool que parezca vivir en

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¿Qué fue de las niñas coupletistas?

Confession time: lo paso fatal con los castings de los realitys. Sufro lo indecible con los pobres participantes, pasando de la vergüenza ajena a la tristeza solidaria rollo empatía total. De vez en cuando puedo llegar a disfrutar algo con los más mejores, pero luego están todos esos de la categoría he venido porque he perdido una apuesta, que quiero pensar que realmente han ido porque han perdido una apuesta, que si no me pongo enferma. Y sin embargo llevo tres horas, que ya son horas, viendo Tienes talento. Me quedé pillada con una señora que intentaba que su cochino

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De nombres compuestos y abreviaciones varias

A veces acumulamos conocimientos que no sirven absolutamente para nada pero que, oye, van la mar de bien cuando juegas al trivial. Este post es un claro ejemplo porque, ¿alguien duerme mal por no saber el nombre completo de D.J. Tanner? Y los listillos que han soltado de carrerilla un Donna Jo, que no contesten, repelentes. Pues no, seguramente el tema no nos quita el sueño. Pero por si acaso, y para que veáis que en esta casa nos preocupa vuestra salud y vuestra reputación trivialera, ahí van los nombres completos de las iniciales más famosas de la tele: D.J.

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Todo es mentira – Introducing Rachael Ray

El otro día un compañero me comentaba lo decepcionado que se sentía después de haber descubierto, a través de los extras de Alias, que Jennifer Garner no es, en absoluto, la diosa del espionaje que todos vemos en Sydney Bristow (y que abre mucho la boca cuando se ríe, eso lo tiene). En esta casa Jennifer nos cae bien, no cabe duda, y su hija es nuestra mascota oficial, ya lo sabéis, pero la chica es muuuu de pueblo, para qué negarlo. Y me diréis, ¿qué tendrá que ver Jennifer Garner con Rachael Ray? Pues que, al hilo de las

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El día que conocí al presidente Bartlet

Hace mucho, pero que mucho tiempo, tanto que me asusta, una servidora era becaria de producción de un programa debate en TV3. El día de mi primer programa coincidía con el Festival de Sitges, así que los chicos de producción se las arreglaron para llevar al directo a Martin Sheen, que andaba por ahí promocionando Spawn, y es así como conseguí esta postal firmada por el que que dos años después se convertiría en el presidente más pirulacho de los estados juntitos. Reconozco que la he tenido lustros apilada en el fondo de una de esas cajas donde los trastos

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El síndrome Clooney – Grenier

El inexorable paso del tiempo puede parecer vertiginoso, pero creedme, a no ser que te llames Baby Jane, es imperativo reconocer que el tiempo hace grandes cosas en nosotros: nos convierte en diablos viejos y astutos y, en la mayoría de los casos, nos buenorriza un poquito. Ya vimos hace tiempo el caso Patrick Dempsey, pero hoy quería centrarme en el síndrome Clooney – Grenier, o síndrome parece mentira que siendo primo del eslabón perdido te hayas convertido en esto. Prueba número 1: George Clooney de joven No me negaréis que parece que el tío esté a punto de lanzarse

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Alienígenas de verdad, alienígenas de Farscape

Está claro que en esta casa nos fascinan los cylons y nos pierde el capitán Malcolm Reynolds, pero no por eso vamos a dejar que las gafas de pasta se nos acoplen a la tocha olvidando que otra ciencia ficción es posible, una ciencia ficción con alienígenas de verdad, verdes, viscosos y hasta malolientes si es necesario, alienígenas que viven en mundos imposibles y remotos, con culturas y tradiciones casi inimaginables, disfrutando la paz o sumidos en eternos conflictos. Alienígenas de verdad. Alienígenas de Farscape. Farscape pasará a la historia con esa etiqueta chunga de “serie de culto”. También pasará

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