No permitiré que nadie te arrincone
Las de nuestra generación nos lo sabemos de memoria… ahí que voy: traje una sandía, qué frase tan original, vuelve a tu cuna, baby, no permitiré que nadie te arrincone, mira todas estas sobras, ¿aún quedan niños hambrientos en África?. Frak, ¡acabo de recordar que la madre de Baby es la madre de Lorelai! Ya me he recuperado. Sí, esto es Dirty Dancing: guión demencial y actuaciones mediocres, pero el hit del verano del 87 y, debo reconocerlo, la primera vez en mi vida que pensé Oh Dios Mío (a buen entendedor pocas palabras bastan). Al año siguiente, y aplicando
Quiero más!