Machirulizando a Dawson
James Van der Beek siempre será Dawson. Eso es duro, claro. Duro porque llevará un sambenito de por vida y duro porque Dawson era imbécil. James, como la mayoría de miembros de Dawson’s Creek ha mejorado con los años (Katie, tú no, hija, tú has ido a peor). Porque, reconozcámoslo, ese cabezón no era ni medio normal. El pobre James no ha tenido suerte superando el papel que le hizo famoso. Intentó hacer pelis indie, que le sirvieron como trampolín a sus secundarios, mientras que él no convencia (The rules of atraction, o I love you, I love you not,
Quiero más!