Violet cutie Affleck Garner, la niña que me reconciliará con Ben
Parece que últimamente la maternidad se ha convertido en una plaga y las celebrities insisten en procrear/adoptar (la señorita Pony estaría tan orgullosa…) no sé si para montarse su propio equipo de futbito multiracial o porque les molan las canastillas del caprabo. El caso es que yo ya hace tiempo que tengo elegido a mi vástago preferido, que no podía ser otro que Violet, la encantadora hija de Jennifer Garner y Ben Affleck.
A parte de ser una preciosidad (y a pesar de heredar las “orejillas” de su mami), lo que me mata de Violet son las escenas familiares que se monta con sus padres. Ya sabemos que los Affleck-Garner tiran pa’l monte, vaya, que son más de pueblo que Ana de las Tejas Verdes, pero la verdad es que sus salidas lúdico-festivas enternecerían a un orco.
Yo ya me había acostumbrado a ver a Jennifer, toda chandalizada, recorrerse la mitad de parques del país y parte del extranjero con la happy flower pink Violet a cuestas demostrando que puede ser portada de Elle y pringarse con el vómito de su hija a la vez, pero eso no tiene mérito, porque Jen siempre me había caído bien. Lo fuerte es que fotos como la que sigue consigan que casi olvide que Ben Affleck estuvo a punto de casarse con JLo en un alarde de estupidez infinita que, en él, supongo, sí debía tener precedentes.
Tendremos que reconocer a Bennifer que su hija se lleve de calle el premio a la más cutie de todos los celebrity children (aunque Jen tiene bastante más que ver en eso que Ben), claro que si yo fuera ellos la entrenaría concienzudamente por si en el futuro se encuentra con Suri o, peor, con Liam (OMG, sería algo así como “Pánico en el parque”), aunque confío en las ventajas de crecer en un hogar donde hay más neuronas que cienciólogos. Ánimo Ben, tres pasitos más y comenzarás a caerme bien.