Y nos volvimos a casa con la figurilla

Las chicas ByTheWay.tv hemos tenido una semana movidita en la que, entre otras cosas, se ha ido a freir morcillas nuestro preciado anonimato, así que, como from lost to the river, ahí va nuestra particular autofoto de celebración.

Las chicas ByTheWay.tv

Resulta que los chicos de 20 Minutos decidieron que ByTheWay.tv debía llevarse este año una de sus figurillas del tío gritón, lo que a estas alturas ya debéis saber la mayoría, pero seguro que hay otras cosas que no sabéis de la fiesta:

Llegamos tarde, vaya que casi no llegamos, es los que tienen estas compañías que te tutean, que son tan cool e informales que te suben a un avión con Yasmina de Asturias y sus secuaces y de dejan en Madrid una hora tarde. En fin.

Luego en la fiesta, la cosa (el premio, vaya) nos pilló de sopetón y acabé subiendo al estrado con la cerveza a cuestas al más puro estilo Starbuck. Irene plantificó el vinito en una papelera que había por allí, lo que le dejó las manos libres para apoderarse del premio, que pesa un cojón y destiñe, así que ya sabéis quien acabó la noche con la mano azul.

Las chicas ByTheWay.tv

Yo, mientras tanto, descubrí el placer de tener veinte cámaras flasheándome. A Irene el tema fotos no le pareció tan chachi piruli y casi huye antes de tiempo, menos mal que la pudimos parar. Como yo estaba en plan “seguid, seguid haciéndome fotos” e Irene no pensaba en otra cosa que en largarse con el premio, nos olvidamos de las coronas a lo Rory Gilmore que llevábamos en el bolso por si acaso. En la foto no se ve, pero se iluminaban con un ritmo de lo más pirulacho.

La nota chunga de la fiesta se la llevó el semi-intento de hurto de nuestra figurilla por parte de algunos resentidos no-ganadores que, joder, ni siquiera competían en nuestra categoría (tanto el blog ausente como papel continuo han hecho uso del fair play, que quede claro). A ver, majetes resentidos, que solo es un premio, es más, según los del aeropuerto es un objeto contundente. No es un Pulitzer ni un Oscar, ni siquiera conseguirá la paz en el mundo, así que miremos las cosas con un poco de perspectiva.

Desde aquí, tanto a los que nos han apoyado como a los que no, tanto a los que alegran como a los que no, tenemos un par de cosas que decirles: muchísimas gracias y be teligious, my friends.