Aberraciones titulares

Títulos

Vuélvelos a contar, Sam

Sólo el dios de la tele sabe que yo nunca he sido una talibán de la Versión Original, así que nunca vilipendiaré a alguien por querer ver Anatomía de Grey en el idioma del Cid Campeador, pero es que a veces me ponen muy difícil eso de ponerme el mundo por montera y defender el doblaje. Pero mi guerra de hoy no es contra la gente que tiene las peloteras de traducir bitches por “playas(beaches), si no por los iluminados que deciden usar toda la creatividad que su educación superior les ha dado para cambiar los títulos a las serie.

Haciendo un ejercicio de memoria a fondo, he llegado a la conclusión que hay varias escuelas de pensamiento en esto de la traducción de títulos. Por un lado está la conservadora, que intenta hacer una traducción más o menos exacta del título de la serie, para que no fuese caso que la gente se perdiese deduciendo significados y traducen literalmente series como Dos hombres y medio – Two and a half men , Desaparecida – Vanished o Cómo conocí a vuestra madre – How I met your mother. Pero sólo puedo dar gracias al cielo porque alguien se dio cuenta de que traducir Friends por «Colegas» era altamente innecesario y perturbador. Algunas traducciones que nunca podrían ser literales, se entienden porque son expresiones específicas de cada idioma: Criando Malvas – Pushing Daisies, A dos metros bajo tierra – Six feet Under o Hasta que la muerte nos separe – ‘Till Death.

En esta línea conservadora también estarían los que le dan un toque de creatividad al título para que el pueblo lo entienda, pero respetando el espíritu original: Aquellos maravillosos años – The Wonder Years, Aquellos maravillosos ’70 – That 70’s Show. Ese libre albedrío en el uso del “Aquellos maravillosos loquesea”, me recuerda a la tendencia que tiene Antena 3 a programar series rebautizadas como “Cosas de …”. A saber: Cosas de hermanas – Sister, Sister, Cosas de gemelas – Two of a kind o el ultra-patillero Cosas de Marcianos – 3rd Rock from Sun. Supongo que el titulador se dejó llevar por la nostalgia al recordar la gracia que le debía hacer la cacofónica Cosas de casa – Family Matters, que es el resultado perfecto de unir la manía de las “cosas de…” con la persecuta de la “casa”. Otras sufridoras del “efecto casa” son Un chapuzas en casa – Home Improvement, Un hombre en casa, Un genio en casa…

Títulos

Largest title ever?

Algo que es de una cutre supina es titular las series haciéndonos creer que han mantenido el título original, pero cambiando ciertas palabras que hacen que el resultado roza el sinsentido: Dawson crece – Dawson’s Creek, El secreto de Veronica – Veronica’s Closet, Siete en el paraíso – 7th Heaven o el más grave de todos: Cinco Hermanos – Brothers & Sisters. Y aunque soy consciente de que «Hermanos y Hermanas» hubiese sido una traducción patillerísima, creo que alguien podría haberle echado un vistazo a la serie para saber que lo de 5 hermanos está totalmente obsoleto al minuto 2.

Una línea de pensamiento más educativa es la que intenta mantener el espíritu original de la obra, pero atemorizados por que el público no entienda el mensaje, le añaden o suprimen algunas palabras al mensaje. En el lado de los añadidos, encontramos enrevesamientos como El ala oeste de la Casa Blanca – The West Wing o Mis chicos y yo – My boys. Mientras que sigue siendo un misterio para mi cuando intentan facilitar el trabajo acortando ciertos nombres: Sexy Money – Dirty Sexy Money, Studio 60 – Studio 60 on the Sunset Strip, Dresden – Dresden files, L – L Word o Las aventuras de Christine – The new adventures of old Christine.

Títulos

Crece, se reproduce y muere…

Un nuevo estilo se está haciendo paso entre los creadores de títulos que consiste en dejar el título de la serie original, pero añadiéndole la traducción creativa entre paréntesis. Obra de estos dechados de imaginación son títulos como Fringe (Al límite), True Blood (Sangre Fresca), Nip-Tuck (A golpe de bisturí), The Shield (Al margen de la ley), The Wire (Bajo Escucha) o The Riches (Familia de impostores). Cabe añadir que esta opción es altamente cutre, ya que es un sí y no a la vez, querían ser modernos al dejar el título original, pero el castrador que llevan dentro ha sido más fuerte. En serio, ¿Al límite?

La línea de pensamiento más modernista es la que, haciendo un ejercicio de pragmatismo, han decidido dejar los títulos intactos, los entienda la gente o no. Di que sí, hombre, que cojan un diccionario. Así nos encontramos con cosas tan curiosas como Friday Night Lights, Journeyman, Men in Trees, Moonlight, Prison Break, Scrubs, Arrested Development, One Tree Hill, The Closer o Queer as Folk. Algunas no las debe saber traducer ni el tato así que, después de pasarle la tarea al becario, decidieron que, de perdidos al río. El problema con dejarle el trabajo al becario es que te crees que eres un moderno por dejar que la serie se llame Gossip Girl y, cuando empieza la serie, te enteras que al personaje lo han llamado “La reina cotilla”. Alarmante.

Pero la peor de todas es la escuela dadaísta, la más experimental, a la que todo le importa un pimiento y podría haber perfectamente titulado a Charmed como “La de las 3 tetonas ligeras de ropa”. Ni tienen nombre ni perdón, aberraciones del tipo Divorcio en Hollywwod – The Starter Wife, Servicio completo – The Secret diary of a call girl, Las voces de los muertos – Afterlife, Padres Forzosos – Full House, Primos Lejanos – Perfect Strangers, Triunfadores – Big Shots o Sin cita previa – Private Practice. Mención especial al subidón de azúcar que le dio el que se le ocurrió titular Sensación de Vivir a Beverly Hills 90210. No sé qué piensan hacer cuando estrenen la nueva 90210. Yo propongo Sensación de Vivir: La Nueva Generación.