En el país de los ciegos…

En el país de los ciegos, puñetera gracia que le hace al tuerto que le falte un ojo. Porque que te quiten un ojo, no mola, por mucho que en películas, cómics y demás el llevar un parche desprenda un halo de aventurismo romántico, o algo así. O como mínimo es muestra de ser duro de narices, o de tener un pasado chungo, o las dos cosas. En fin.

Si habéis visto el último de Fringe (valga esta primera frase para espoilerfóbicos, aunque el espoiler es mínimo, pero si sois espoiler-nenazas pasad al siguiente párrafo), pues eso, que si habéis visto el último de Fringe, una de las cosas que os preguntaréis es qué ha pasado con el ojo del Broyles de 2026, que parecía que se había puesto hasta arriba de melange. Al bueno de Broyles le han ahorrado lo del parche, que se supone que en el futuro somos súper listos y hemos inventado ojos biónicos, o algo, pero aún no sabemos cómo hacer que se parezcan a los de verdad. Vale, seguramente Broyles pueda ver Los Piratas del Caribe 8 en 3D, pero su ojo es raro, raro.

A G’Kar, en Babylon 5, también le hacen un ojo nuevo, que ve y todo, después de ser torturado por el emperador Cartagia. Así supimos qué pasaba con su ojo, ya que en alguna visión del futuro ya le habíamos visto con un parche. Dios, qué redondísima es Babylon 5.

Si a G’Kar le quitan el ojo izquierdo, el que quitan los cylons a Saul Tigh en Battlestar Galactica es el derecho, y el amigo Tigh se pasó media serie con ese parche color carne. Curiosamente, Michael Hogan también apareció hace poco con el ojo derecho tapado en un capítulo de Smallville interpretando Slade Wilson.

Qué decir del amigo Mikhail Bakunin de Perdidos, con el que la expresión duro de matar cobra un nuevo sentido. Como Perdidos es así, a Mikhail lo hemos visto con los dos ojos, y perdiendo un ojo, aunque relativamente… en fin.

El que realmente necesitaba un buen parche para parecer más maloso era Xander, de Buffy Cazavampiros, que pierde el ojo en manos de Nathan Fillion, interpretando al maloso Caleb. Curiosamente, Nathan Fillion también destroza el ojo de Lawrence Dobson en Firefly. Menudo historial se gasta el chico, yo de Beckett me andaría con cuidado.

Volviendo al futuro, o al pasado, o donde sea, recordaréis que en Las aventuras del joven Indiana Jones, el viejo futuro Indi llevaba un parche… ¿Habrá sido algún alienígena azteca?

Y vamos con las chicas, porque no me olvido de Lily Charles, de Pushing Daisies, que perdió el ojo limpiando la caja del gato y se gastó desde entonces los mejores parches de la tele.

También tenemos por ahí a Nadine Hurley de Twin Peaks, que perdió el ojo en un accidente de caza durante su luna de miel. Ideal, vaya.

Vamos a por un par de parches temporales, como el de Betty Suarez, que en How Betty Got Her Grieve Back se da con un cristal y se pasa el capítulo con un parche.

Ahora es el turno de la gran Monica Geller, que en The One With Chandler In A Box, preparando la cena de acción de gracias, tiene un percance con algo de hielo y acaba en la consulta del hijo de Richard, el buenorro a la vez que cara-palo Michael Vartan.

Y finalmente… qué me decís de la misteriosa señora con el parche de metal que asalta los sueños de Amy Pond? Un misterio más para el nuevo doctor.

By the way, ahí va un listado de parches cinematográficos, por si a alguien le interesa. Enjoy!