Monday’s TV Randomness
De nuevo lunes. Así que para no dejarnos arrastrar por la depresión, lancémonos de cabeza hacía una ramdomnización televisiva que nos levante los ánimos y nos ayude a darnos cuenta de que aún hay muchas chorradas de las que reírnos.
Fringe sigue navegando en el mar de la indiferencia: no apesta, pero esta lejos de ser una buena serie. Sé de mucha gente ya la ha abandonado pero, llamadme sentimental, yo la sigo viendo. Eso sí, como un filler cualquiera, aunque ame a Joshua Jackson.
La emoción me embargó el otro día al ver que Grams visitaba a Pacey en Boston, que le pillaba cerca de Capeside. Me emocioné tanto que hasta creí ver una chispa de atracción entre ella y Walter. Ah, el amor geriátrico.
Y JJ sigue con sus crossovers en forma de easter eggs. Oliviadanam se compra unos billetes de avión para volar con Oceanic. Esta mujer no gana para sustos.
p.s. Ana Torv se acaba de casar con Mark Valley. No sabía yo que oliviadanam salía con janscat.
Los últimos coletazos de Battlestar Galactica no están dejando indiferente a nadie pues, queriendo cerrar ciertas tramas y darle un final a cada personaje, están forzando aún más las cosas. Más que cuando decidieron que Gaius Baltar era el nuevo Jesús de Nazaret.
El tema es que cuando en una serie se llega a ese punto donde se le quiere dar significado a todo y se pretende cerrar el destino de cada personaje, muchos acaban muriendo, pues es la salida más definitiva de todas. Como en el final de Harry Potter, muchas de estas muertes son totalmente innecesarias. Por eso he encontrado este gráfico sobre quién tiene más papeletas de morir o sobrevivir y quiénes son los más prescindibles. Apolo, por supuesto, no puede morir. Es la gran esperanza blanca.
Lo de Grey’s Anatomy últimamente no tiene nombre. Entre los tumores cerebrales que te hacen ver muertos, las auto-operaciones de apéndice y los lesbianismos forzados, el espectador de a pie no gana para sustos.
Hace un par de capítulos, al Dr. McSteamy se le partió el pene, otro alarde de super-guionismo de Shonda Rhimes. Seguro que a Eric Dane, a parte del pito, también le dolió el alma de tener que interpretar esa trama tan interesante. El tema es que la rotura del pene del doctor, lanzó a los espectadores a informarse sobre el accidente, y, como podéis ver, “penile fracture” y “broken penis” fueron los términos más buscados en Google ese día.
En esta imagen no se aprecia bien, pero la habilidad para ocultar embarazos en Gossip Girl es de juzgado de guardia. Salvo en contadas ocasiones que me la ponen en escorzo, no hay manera que le tapen la barriga como dios manda a Kelly Rutherford. Esta buena mujer está a punto de parir y me la ponen en escenas de cama con Rufus y el pobre hombre intenta taparle la barriga con una mano y no da abasto.
En How I met your mother tienen a sus dos protagonistas femeninas embarazadas y, con dos dedos de frente, lo que están haciendo es acelerar el rodaje para los últimos episodios. Básicamente para que Robin y Lily no parezcan zeppelines que ha llegado volando a propulsión al piso de Ted.
Tened piedad de las actrices embarazadas y cogedles sólo primerísimos primeros planos.
Amigos, amigas, todos: Josh Duhamel se ha casado. Con Fergie. Y sí, el feísmo de la cantante de los Black Eyed Peas se le ha pegado a nuestro amado macho.
Si al casarse con Ben Affleck descubrimos que Jennifer Garner era como del pueblo, gracias a su unión con Stacy Fergusson, hemos descubierto que Josh Duhamel también es un hortera de bolera.
