Autor: Montsinya

La muerte patillera

No voy a hacer aquí otra reflexión sobre el uso o abuso de las visitillas de la Parca en favor de la tensión dramática de un cliffhanger, que ya es tarde y no tengo la cabezota para ruidos. Lo que sí podría quitarme el sueño, además de mi tercera lata de coca-cola hoy, es eso que dicen por ahí sobre la clonación de Lana Lang. Frakkety frak, ¡como si no tuviéramos suficiente con una! Ah, no, un momento, que resulta que, como bien se encargaron de anunciar, parece ser que una de las Lanas la palmó al final de la

Quiero más!

The Starter Wife… better not to start

Hecho número 1: Debra Messing me cae bien. Hecho número 2: el verano recalienta el asfalto y las neuronas. Hecho número 3: tengo cierta debilidad por la literatura de “encefalograma plano”. Consecuencia número 1: he visto The Starter Wife. Consecuencia número 2: Frak, Stephen Moyer tiene menos carisma que una goma de pollo. Consecuencia número 3: sigo sin reconciliarme con Miranda Otto. En realidad es culpa mía por empeñarme en ver una historia de superación personal en el frívolo Hollywood cuando todos sabemos de sobra que no necesitamos más blahniks en nuestras vidas. De verdad que me sabe fatal que

Quiero más!

Pasadlo bien ahí fuera

Estoy a punto de dedicarme a la no demasiado agradable tarea de evitar que se repita el penoso episodio de ayer noche en el que pillé una cucaracha paseando libremente por mi mesita de noche, la muy cabrona. Mientras tanto, os dejo con un anuncio la mar de divertido de Jeep, en el que pegan un repasón a imágenes divertimíticas de los últimos 66 años digamos, algo enjeepadas. Ojito con la última. Apuesto a que lo conduce Jacob, el muy notas. Gracias, Gran hermana, por pasarme el video y por tu asistencia telefónica durante la crisis cucarachil de ayer. Ahora,

Quiero más!

Hotel Dusk: Nathan Fillion en mi nintendo

Abandoné la nintendo cuando me declaré manifiestamente incapaz de conseguir que mi Princess Peach rescatase al garrulo de Super Mario. Incluso me entraron ganas de quemar la frakking sombrilla y bailar alrededor… en fin. Recuperé la nintendo cuando adquirí Hotel Dusk, un jueguecillo del que me habían hablado bastante bien y que prometía ser algo así como un comic-novela de misterio interactiva. Vaya, como aquellos libros «elige tu propia aventura» pero sin el engorro de tener que ir saltándose páginas y con aspecto de comic. La historia no está nada mal. Ordenada en capítulos, y con la estructura introducción-nudo-desenlace de

Quiero más!

Oda al donut

Seguramente no os importa, porque los que aún rondéis por aquí estaréis haciendo las maletas, pero ayer en el trabajo tuve un día de esos que desearías que Hermione te lo borrara de la cabezota, y no puedo dejar de pensar que la debacle se podría haber suavizado si, como ha pasado con ciertos miembros de la prensa, Fox me hubiera enviado una caja de donuts rosas para invitarme a un visionado favorable de la peli de los Simpson. Sin ánimo de ofender, la verdad es que estos donuts no tienen nada que ver con la “rosquilla oficial” de Burger

Quiero más!

La Orden, simpsonizada

A no ser que viváis en la órbita lunar, seguramente ya os habréis simpsonizado y tenéis un mini-yo amarillo a vuestra imagen y semejanza (cuando estos chicos concibieron la campaña para el estreno de la película de los Simpsons, definitivamente los cielos se abrieron), claro que hay algunos que han dejado un poco de lado el narcisismo habitual del ser humano y se han dedicado a simpsonizar a los otros protas del verano: los secuaces de la Orden del Fénix. El autor es Tod Parkhill, de Young American Comics y la iniciativa, ¡cómo no!, forma parte del pirulacho bombardeo Simpson

Quiero más!

Malo maloso de la casa de los malos

Coincidiremos todos en que Ben Linus (Michael Emerson) es uno de los malos más chungos de la televisión que nos ha tocado vivir. El tío miente más que habla, es cruel, frío, manipula hasta a las piedras, se carga a cualquier hijo de vecino que le lleve la contraria y oye, también hace sus pinitos en el campo de la tortura. Miradle bien, el pobre tiene una pinta de perturbado insomne capaz de provocar alteraciones en la Fuerza. Ya sé que medio mundo se imagina a Voldemort como Ralph Fiennes y el otro medio como Celia Hodes, pero yo me

Quiero más!

Fame! I want to live forever!

Uno de mis placeres culpables de este verano es Fame, porque la fama cuesta, qué narices, y ya llevo semanas pagando con sudor el tener que quedarme en la city sin aire acondicionado. Supongo que cuando te pones en plan revival con tanta ilusión tiendes a elevar tus niveles de benevolismo ante lo que a priori puede ser un producto que recuerdas con cariño pero que seguramente ha envejecido fatal, y más si es fruto de esos extraños 80. Será por eso, quizás, que más de 20 años después no me ha importado en absoluto volver a engancharme a Coco,

Quiero más!

Unos tejanos para Suri

Después de semanas de aguantarme, hoy tengo que echarlo todo fuera. ¿Alguien puede asesorar un poquito a los Cruise respecto a la ropa en que embuten a la pobre Suri? Katie, ¿es que tu amistad con Victoria solamente te ha servido para cortarte el pelo y comprarte tres docenas de cinturones y gafas a juego? Ya resulta bastante duro que Katie se haya hecho unos pantalones con la ropa que le sobró del vestido de Suri de St Patrick’s, pero que la niña lleve un vestido desteñido de su abuela me parece excesivo. Te voy a decir una cosa, Katie,

Quiero más!

Weeds al borde de un ataque de nervios

Vi la primera temporada del tirón en una época en que mi espíritu necesitaba urgentemente algo de comedia televisiva y ya me había pulido la también primera de “How I met your mother”. Nada que ver una serie con la otra, eso es tan cierto como que la hierba es verde, pero era igualmente divertido ver cómo la señora Botwin (Mary-Louise Parker) aprendía a llevar su pequeñito y peculiar negocio rodeada de simpáticos disfuncionales. Por cierto, que mi disfuncional preferido fue y sigue siendo Celia (Elisabeth Perkins), cuya mala leche es de pura carcajada, seguida cada vez más de cerca

Quiero más!

Footloose + Zac Efron… No Way

Para empezar, ¿era realmente necesario un remake de Footloose? Es más, ¿era imprescindible hacerlo en forma de musical? Y por si no fuera poco, ¿hacía falta que la protagonizara el niño cantor Zac Efron? Vale, asumo que este chico es el ídolo de las niñas y el gurú de estilo de los niños, pero, en serio, es Zac Efron, el niño flequillo. La verdad es que no sé qué me inquieta más, que parezca salido de Madame Tussaud’s o que lleve reflejos en su linda melena. Luego pasa lo que pasa, que vas paseando por ahí y todos los adolescentes

Quiero más!

La tía de Frankenstein

Últimamente he estado practicado cierta regresión voluntaria re-visionando los siete capítulos de esta serie que ocupó alegremente mis viernes por la tarde durante un breve periodo de mi infancia. Sorprendentemente, y quizás se debe a algún inexplicable acceso de nostalgia, he disfrutado como una enana con “La tía de Frankenstein”, una serie producida entre Alemania, Austria, Checoslovaquia, Francia, Suecia, Italia y España en una época (1987) en que no pasaba absolutamente nada si en horario infantil se fumaban puros constantemente y/o los personajes se emborrachaban con jerez. Casi nada. «La tía de Frankenstein» explica con muchísima imaginación, algo de buen

Quiero más!