My crazy Food Network addiction
He vuelto de mis merecidas vacaciones pre-navideñas, así que os pido disculpas por la ausencia imperdonable de renovación en ByTheWay. He tenido la suerte de recorrerme varios mercados navideños por parte de la Europa civilizada y he vuelto pensando en Navidad y todo tipo de recetas nuevas. Esta obsesión por la cocina me acompaña allí dónde voy, así que no es de extrañar que mi canal favorito sea Food Network, no sólo porque hablen de cocina todo el día si no porque lo hacen como si de un capítulo de Lost se tratase con sus misterios, su banda sonora y sus cliffhangers de infarto. Porque sí, amigos, cocinar unos macarrones con queso puede ser también un deporte de alto riesgo.
Hace tiempo ya os hablé de mi obsesión por Iron Chef America, una competición adrenalínica de chefs profesionales, así que hoy os voy a iluminar estas fechas navideñas con otros tres programas de la cadena que me tienen totalmente enganchada.
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CHOPPED
Chopped es otra competición entre chefs de todos los pueblos de América profunda donde cuatro personajes compiten para preparar entrante, plato principal y postre. En cada ronda uno de ellos es eliminado (chopped) por el jurado, hasta que en el postre sólo compiten dos de los concursantes. La gracia es que sólo tienen 20 minutos para el entrante y 30 para el plato principal y el postre y, lo peor de todo, en cada ronda se les da una cesta con los ingredientes principales de cada plato. Por supuesto, todo es una gran putada porque te obligan a cosas como hacer un entrante a base de sandía, sardinas en lata y queso pepperjack o un postre con tortillas, vino prosecco, bacon y castañas.
La combinación de sorpresa/cabreo de los cocineros y la mala leche que gasta el jurado, hacen de Chopped todo un must. Quién se puede resistir a ver qué hace un colgado de Wichita con wontons, ositos de goma, higos y cerveza.
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THE NEXT FOOD NETWORK STAR
Los cocineros del Food Network son estrellas mediáticas en Estados Unidos. Gente como Paula Deen, Rachael Ray o Ina Garten son personalidades comparables a Oprah o Martha Stewart con millones de fervientes admiradores que compran sus libros y DVD’s como si fuesen la Biblia de la cocina americana. Así que no es de extrañar que mucha gente esté deseando convertirse en uno de ellos y con The Next Food Network Star pueden conseguirlo. Food Network lleva cinco temporadas organizando esta competición para encontrar a la próxima estrella del canal, pues el ganador no sólo se lleva su cheque de rigor si no que le dan su propio programa.
Así que este reality no va sólo de cocinar si no hacerlo bien delante de las cámaras. Porque, asumámoslo, lo importante no es ser buen cocinero sino parecerlo. Este programa no sólo es adictivo por saber quién va a ganar, sino porque encima viven juntos, así que imaginaos la convivencia cuando pueden estar en juego miles de millones. Y, además, los americanos son unos ultra motivados, así que todo lo hacen a tope, por su familia, por Dios y por América. Y por los caídos en combate, claro. Brillante.
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ACE OF CAKES
Este señor de la foto es Duff Goldman, dueño de Charm City Cakes en Baltimore, la tienda de pasteles más increíble de todo el mundo. Porque los chicos de Duff (muchos son sus amigos de la juventud), más que pasteleros son arquitectos, diseñadores y pintores alucinantes. Ace of Cakes es uno de los programas con más audiencia del canal, superando hasta a retransmisiones deportivas; ahí es nada. Su éxito es una combinación de dos factores, los pasteles imposibles que son capaces de elaborar y el ambiente distendido que hay en la pastelería. También está el hecho que entregan los pasteles en mano, así que muchas veces el programa se convierte en una road movie pastelera coast to coast.
Por supuesto sus pasteles valen una pasta y todavía me cuesta creer que sepan bien, lo que es innegable es que son espectaculares. Algunas de sus creaciones más impresionantes son, la isla de Lost, el castillo de Hogwarts para la premiere de Harry Potter, la caja gigante de Crayola, una réplica del Hubble para la NASA, el pastel de la Super Bowl o el pastel broadwayano de Hairspray.
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DINERS, DRIVE-INS & DIVES
Una de las personalidades más chocantes del Food Network es la de Guy Fieri, el típico tío que te parece asquerosísimo de entrada pero te acabas enamorando de él por su desparpajo y su pasión por las comidas abundantes y grasientas. Guy fue el ganador de la segunda temporada de The Next Food Network Star porque América se quedó fascinada con su contagiosa manera de ser.
Cualquier programa en el que salga Guy Fieri es digno de ser visionado, pero mi favorito es Diners, Drive-ins & Dives, donde Fieri recorre todo Estados Unidos con sus chanclas y su Chevy Camaro rojo buscando los antros más recónditos y sorprendentes del país donde poder comer todo tipo de comidas grasientas americanas, fritas, asadas o embocadilladas.